Las donaciones se quedan en casa
TweetUn trabajo reciente me ha llevado a tener que repasar las memorias de las grandes ONG de cooperación al desarrollo en nuestro país, junto con el de aquellas organizaciones calificadas como singulares, es decir, Caritas y Cruz Roja.
Las conclusiones que se pueden sacar de las memorias de las últimos 3 años son bastante claras. La mayoría de las ONG de cooperación al desarrollo, con alguna excepción como MSF, tienen presupuestos de socios y donantes estables o más bien a la baja.
Este no es el caso de las 2 organizaciones singulares antes mencionadas; tanto Caritas como Cruz Roja, con mensajes y presupuestos especialmente centrados los últimos 4 años en atender las necesidades de los que viven aquí, crecen cerca del 20%.
Sin duda, el crecimiento de las ONG de desarrollo en España los años 90 y 2000 ha sido consecuencia principalmente de 2 factores:
- Un conjunto de situaciones de emergencia que empezaron con la crisis de los Grandes Lagos, para acabar en Haití, con gran impacto en los medios de comunicación. ¿Por qué no funciona igual como emergencia el Cuerno de África? Quizá por que la emergencia ahora está entre nosotros.
- La percepción que nuestra sociedad vivía en la riqueza, a veces en la opulencia y que, por tanto, era de cajón ayudar a los pobres de los países en desarrollo.
Parece obvio que las cosas han cambiado; ya no somos un país rico, muchos de nuestros amigos y vecinos están en un paro que no saben cuando va a acabar y hay una cierta sensación de ansiedad que recorre la espinal dorsal de muchos de nosotros.
Esto explica que haya una clara tendencia a que las donaciones se queden en casa y plantea un reto crítico tanto a las ONG y a las fundaciones de acción social.
Las ONG de cooperación, ya castigadas por lo recortes públicos, van a tener que hacer un gran esfuerzo para convencer a los donantes de que sus donaciones y cuotas de socios son importantes en los países en desarrollo. El mensaje de la campaña del banco de Alimentos este fin de semana ya era muy explícito: “lo damos todo contra el hambre de aquí”. No va a ser una tarea fácil para las ONGD.
Las organizaciones de acción social se enfrentan quizá a un reto más complejo: la inmensa mayoría nunca se han preocupado de captar socios o donantes, a algunas no les ha preocupado llegar al año 2011 sin enseñar su cuentas y les cuesta mucho salir del marco lógico de la reivindicación de los presupuestos públicos. Algunas son sólo asociaciones con menos de 6 socios que gestionan presupuestos de más de 15 M€, todos de recursos públicos.
Cierto que si se echa una ojeada a las actividades solidarias de estas navidades, uno se da cuenta que empiezan a proliferar también las peticiones de las fundaciones de acción social, Por tanto, algunas están despertando.
Ahora bien, mientras el sector de acción social sea tan minifundista y la captación de fondos requiera una cierta lógica de mercado de ámbito estatal, seguramente sean Caritas y Cruz Roja las grandes destinatarias de este cambio.
El Ayuntamiento de Barcelona lo ha entendido y ha puesto parte de sus espacios publicitarios al servicio de las fundaciones de acción social que se dedican a los sin techo. Pura innovación social o prevención ante las dificultades crecientes.
Hay muchas fórmulas a mano de las organizaciones de acción social para afrontar este reto y se arriesgan a perder una oportunidad.
No es una cuestión baladí, hablamos de 780M€ de donantes individuales, según Hacienda.
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